Cada 5 de junio, el mundo conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente,
una iniciativa impulsada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio
Ambiente (PNUMA) que busca sensibilizarnos sobre los principales desafíos
ecológicos que enfrenta el planeta. En este contexto, vale la pena reflexionar
en torno a un problema extendido en todo el mundo, el uso indiscriminado de
plásticos de un solo uso y su impacto devastador sobre los ecosistemas y la
salud humana.
El Día Mundial del Medio Ambiente no debe ser solo
una fecha simbólica. Es una llamada de atención y una oportunidad para actuar,
para transformar nuestros hábitos y exigir soluciones estructurales. La
contaminación por plásticos es una crisis creada por el ser humano, pero
también está en nuestras manos detenerla, revertirla y prevenirla.
Una crisis global que nos involucra a todos
Se estima que anualmente el mundo produce cerca de 400 millones de
toneladas de plástico (ONU, 2023), de las cuales aproximadamente la mitad está
destinada a un solo uso. Estos productos, aunque útiles por breves instantes
—como bolsas de supermercado, popotes, cubiertos, vasos de café o envases de
comida rápida—, pueden tardar más de 500 años en degradarse en el medio
ambiente.
Los efectos de esta acumulación son múltiples. Las
bolsas plásticas, por ejemplo, obstruyen drenajes, lo que incrementa el riesgo
de inundaciones urbanas, y con frecuencia son ingeridas por animales marinos,
provocando su muerte por asfixia o inanición. Los popotes y cubiertos
plásticos, por su tamaño y rigidez, causan lesiones internas en tortugas, aves
y peces, muchas veces fatales. El poliestireno expandido (unicel), ampliamente
usado para vasos y envases de alimentos, no es biodegradable y al fragmentarse
libera microplásticos al aire, al agua y al suelo.
Estos microplásticos —partículas menores a 5 mm— ya
han sido detectados en sitios tan remotos como el Ártico y la Antártida, así
como en la cadena alimentaria humana. Una investigación reciente de Heather A.
Leslie y Marja Lamoree (2022) reveló la presencia de microplásticos en el
torrente sanguíneo humano, lo que abre nuevas preocupaciones sobre sus posibles
efectos en órganos vitales y sistemas hormonales.
El panorama en México
Como es de suponer, México no está exento de esta problemática, de
acuerdo con datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales
(SEMARNAT, 2023), el país genera 7.7 millones de toneladas de plástico al año,
de las cuales solo el 12% es reciclado. A pesar de que existen leyes como la
Ley de Residuos Sólidos (2021) y la Ley General de Economía Circular (2023),
los plásticos de un solo uso siguen representando alrededor del 60% de los
desechos marinos que se encuentran en costas y océanos mexicanos (ONU, 2023). A
nivel global, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) calcula que 11 millones
de toneladas de plástico terminan cada año en los océanos, afectando a más de
1,500 especies marinas por enredo o ingestión.
¿Qué podemos hacer?
Frente a este escenario, es urgente preguntarnos ¿Qué podemos hacer en lo
individual? y ¿Qué deben hacer las empresas y los gobiernos? En el plano personal, cada uno de nosotros puede
contribuir adoptando prácticas cotidianas como la célebre regla de las 3R:
Reducir, Reutilizar y Reciclar. Esta filosofía, promovida por organizaciones
como WWF desde la década de 1970, sigue siendo una guía vigente:
- Reducir el consumo innecesario de plásticos.
Evitar bolsas, envolturas o empaques que solo sirven unos minutos y generan un
impacto ambiental de siglos.
- Reutilizar envases, recipientes, botellas,
cubiertos y bolsas, dándoles una vida útil más prolongada.
- Reciclar correctamente, separando residuos y
exigiendo una infraestructura eficiente para su aprovechamiento, aunque
reconociendo que el reciclaje, por sí solo, no es suficiente.
Además de nuestras decisiones individuales, es fundamental ejercer
presión colectiva, obligando a que las empresas rediseñen sus modelos de
empaque y distribución, eliminando productos plásticos innecesarios y exigiendo
a que nuestros gobiernos implementen políticas públicas más estrictas, fomentando
la economía circular y sancionando prácticas contaminantes, además, nuestros
legisladores tienen la responsabilidad de establecer marcos legales sólidos que
limiten el uso de plásticos de un solo uso y promuevan alternativas
sostenibles. Es decir, este problema sumamente amplio, debe ser atendido de
manera integral y nos debe llevar a la participación individual y colectiva.
Una oportunidad para el cambio
El problema de los plásticos de un solo uso no es una condena inevitable,
sino un desafío que puede y debe resolverse. Tenemos las herramientas
tecnológicas, el conocimiento científico y la conciencia social para lograrlo.
Lo que necesitamos ahora es voluntad política, responsabilidad empresarial y
compromiso ciudadano.
Referencias
Greenpeace.
(2023). Un futuro sin plásticos: informe sobre contaminación plástica y
alternativas sostenibles. Greenpeace México.
https://www.greenpeace.org/mexico/
Leslie,
H. A., & Lamoree, M. (2022). Discovery and quantification of plastic
particles in human blood. Environment International, 163, 107199. https://doi.org/10.1016/j.envint.2022.107199
Programa
de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). (s.f.). Día Mundial
del Medio Ambiente. https://www.worldenvironmentday.global/es
Secretaría
de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT). (2023). Panorama de la
gestión de residuos plásticos en México. Gobierno de México. https://www.gob.mx/semarnat/
Organización
de las Naciones Unidas (ONU). (2023). La contaminación plástica y su impacto
en los océanos. Naciones Unidas. https://www.un.org/es/observances/oceans-day
World
Wide Fund for Nature (WWF). (2023). Plásticos en el océano: del problema a
la solución. WWF México. https://www.wwf.org.mx/
Gobierno
de México. (2021). Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los
Residuos (LGPGIR). Diario Oficial de la Federación. https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/263_110821.pdf
Gobierno
de México. (2023). Ley General de Economía Circular. Diario Oficial de
la Federación. https://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5674833&fecha=23/06/2023